Un ejemplo de esa participación en un ambiente de normalización son Javier Puñal y Nacho González, que aprovechaban la finalización del concierto para hacerse unas fotos para el recuerdo con La Húngara, que en la noche del sábado conseguía abarrotar con su actuación la plaza del Ayuntamiento.
Otros grupos de amigos preferían la música dance en las diversas sesiones organizadas en las terrazas del recinto ferial de la Peraleda. Cualquier ocasión es buena para disfrutar entre amigos.