Un microbús recoge cada mañana a Diana en la puerta de la vivienda de Adquisición del Programa de Vida Independiente y la traslada a Mocejón, donde con otros doce jóvenes es alumna de un curso de conservación de jardines y se inicia en el rol del trabajo. Al final de la jornada, el mircrobús la devulve a la puerta de su domicilio.
En el Centro Ocupacional participa en las tareas de autogestión de las rutinas: para el desayuno organiza con sus compañeros los menús diarios y planifica la compra. En el comedor, ayuda cuando le corresponde a servir el desayuno y a lavar y colocar los platos y tazas.
Para Diana es el primer contacto que tiene con un ambiente de trabajo, de modo que ha comenzado por interiorizar el papel de trabajadora, las obligaciones y compromisos de horario que representa su papel y su interacción con monitores y formadores, además de con el resto de sus compañeros.
Diana se encuentra muy feliz con esta nueva faceta de su vida y así lo demuestra a cuantos conviven a diario con ella.